¿Que te parecen mis tetas hijo?
Llevaban tiempo viviendo juntos aquella madre y su hijo. Desde que su padre se marchó de casa ellos se quedaron solos, lo cual hizo que se tomaran desmasiadas confianzas tal vez. Su madre aquél día, mientras ambos compartían el baño, le preguntó que le parecían sus tetas. El chico se quedó mirando fijamente, lo cierto es que tenía dos tetazas impresionantes. Tras aquella peculiar pregunta no tardó mucho en acercarse para oler sus pechos y probarlos con su boca.
Su madre se puso tan caliente que se arrodilló y poco después estaba comiéndole la polla. Los dos decidieron llegar hasta el final, por lo que salieron del baño y fueron al sofá del salón. Allí mientras la madura estaba tumbada el muchacho la penetró hasta correrse dentro de su coño.