Padre contaba un cuento a su inocente hija hasta que…
Comenzaron a hablar sobre sexo y a la jovencita se le despertó la líbido. Es normal, una muchacha de 18 años solo piensa en sexo. Por eso cuando se quitó el pijama y mostró su coñito a su padre el hombre se quedó en parte sorprendido por la naturalidad con que lo había hecho. Ella empezó a tocarse y le preguntó a su padre si lo estaba haciendo bien. El hombre no tuvo más remedio que intervenir y tocarla él, para enseñarle como un hombre tiene que darle placer. Después comenzó a comerse su coño, pasando su lengua por el clítoris de la chica mientras ella gemía excitada como una golfa.
El hombre no tardó en desnudarse, ahora tocaba enseñarle como tenía que tratar ella la polla de un hombre. Y quien mejor para enseñarla que su propio padre. Ella le hizo una mamada, pero claro, en realidad el maduro se dio cuenta de que poco tenía que enseñarle en ese campo.