llame a una prostituta y aparecio mi tia

Esto es el típico caso que se te pasa por la cabeza cuando estás bromeando con los colegas y que cuando te pasa te das cuenta de que no somos nadie. Como muchas otras veces, este joven abrió el periódico y llamó a una de las señoras de compañía maduras que se ofrecen para aliviar las tensiones de los hombres. Cuando llamaron a casa y abrió la puerta, apareció la exmujer de su tío con el mismo semblante frío que siempre tuvo y sin sorprenderse lo más mínimo, hacía un montón de años que no se veían y ella simplemente iba a hacer su trabajo. Tras el shock inicial, ambos se relajaron e hicieron lo propio entre un cliente y una profesional solo que con el añadido de que alguna vez fueron familia.