Le metí mi polla entera a mi hijastra
Esta dulce colegiala de 18 años es mi hijastra, es decir, la hija de mi actual pareja. Estoy muy bien con su madre, follamos a menudo y me pone cachondo, pero sinceramente esta jovencita me vuelve loco. Es complicado decirle que no a una colegiala de coño húmedo a la cual ves todos los días en tu casa.
Ese día entró en mi habitación mientras aun estaba yo acostado. Ella insistía en que me levantase, y para ello se subió también a la cama. Yo no pude contenerme, con esa faldita de colegiala que llevaba y esas coletas me puse muy cachondo, por lo que alargué mi brazo y toqué su trasero. Al sentir mi mano en su culo ella se lanzó como una perra hacia mi polla haciéndome una impresionante mamada. Después se quitó toda la ropa y se quedó totalmente desnuda, se sentó sobre mi rabo y me la follé.