Le encantaba la polla de su hermano

Que su hermano mayor la ponía cachonda era más que evidente, pero ese día decidió llegar demasiado lejos. Fue ella la que finalmente se atrevió a lanzarse y deslizarse como una gata sobre él hasta encontrar su polla. El tío la esperaba y ella se la metió en la boca, era de suponer que acabaría mamándosela. Se desnudaron completamente y comenzaron a follar en el sofá de casa. Nunca antes lo habían hecho, pero una cosa si que tenía clara aquella guarra, y es que le encantaba la polla de su hermano. Era sin duda la mejor que nunca había probado.