Padre, esto no está bien…
Cuando una chica le dice a su padre que eso no está bien es que en realidad algo anormal está ocurriendo. La cara de degenerado pervertido que tenía el maduro lo decía todo, y es que en realidad lo era. Tocaba a la jovencita sin ningún pudor mientras ella sentía vergüenza por ello. En momentos lo hacía hasta con la mirada perdida sumida en sus pensamientos obscenos en los que siempre se follaba a su hija. Pero al cabo de un rato comprobó que a la jovencita le estaban gustando los tocamientos, eso hizo que se animase todavía más y que se decidiera a ir a por todas.
Y vaya si lo hizo, tras desnudar a la jovencita la tocó sin parar y veía como se retorcía de placer, le estaba encantado. Finalmente y como era de esperar el hombre se folló a su hija.